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Guías y reparaciones

Cómo renovar la fachada de mi casa

como renovar la fachada de mi casa

Renovar la fachada es una forma de proteger tu vivienda y aumentar su valor. La primera impresión que se lleva cualquiera que visite tu hogar empieza por cómo luce la parte exterior, y con el tiempo es normal que aparezcan problemas de humedad, desgaste de pintura o simplemente la necesidad de actualizar el diseño.

Vamos a explicar qué permisos necesitas, cómo preparar la superficie, las distintas opciones de acabado y qué materiales o colores funcionan mejor según tus objetivos. Ten en cuenta que lo primero siempre va a ser evaluar en qué estado está la fachada, así ya observarás si tiene algún daño.

Obras en fachada comunidad de propietarios: permisos

Si vives en un edificio o urbanización, cualquier actuación que implique modificar la fachada entra dentro de las obras en fachada de comunidad de propietarios. La Ley de Propiedad Horizontal en España establece que cualquier modificación en los elementos comunes del edificio (y la fachada lo es) debe ser aprobada en junta de vecinos. Por lo tanto:

  • Solicitar autorización previa: no puedes cambiar el color o instalar un revestimiento diferente sin que la comunidad lo apruebe.
  • Permiso del ayuntamiento: algunas actuaciones requieren licencia de obra menor (pintar, pequeñas reparaciones) o mayor (cambiar revestimientos, cerramientos de cristal).
  • Normativas locales: si tu vivienda está en un casco histórico o en una zona con restricciones urbanísticas, tendrás que ajustarte a los materiales y colores permitidos.

1. Prepara la superficie de la fachada

La clave para que el renovar tu fachada dure es la preparación. Pintar o colocar un revestimiento sin tratar antes la superficie solo hará que el problema vuelva a aparecer en poco tiempo.

Trata la humedad y repara daños

Antes de aplicar pintura o revestimientos, comprueba:

  1. Manchas oscuras o verdes: suelen ser signo de humedad por filtración.
  2. Desconchados de pintura: indican que la pared no transpira correctamente.
  3. Fisuras o grietas: por pequeñas que sean, pueden permitir la entrada de agua.

Para solucionarlo, tienes que sellar las grietas con masilla especial para exteriores, y luego aplicar un tratamiento antihumedad profesional. Si el daño es mayor, habría ya que hacer una reparación estructural antes de pasar a pintar o revestir.

Limpia y protege áreas cercanas

Una fachada limpia garantiza un acabado uniforme. Usa una hidro limpiadora a presión para eliminar polvo, moho o restos de pintura vieja. Después cubre ventanas y puertas con plásticos protectores, protege el suelo y elementos de jardín cercanos con cinta de carrocero, y retira cables o antenas que dificulten el trabajo.

2. Opciones para arreglar tu fachada

Ya podemos pasar a renovar la fachada con principalmente, tres opciones: pintura, revestimiento, cerramiento de cristal.

Pintura

La opción más habitual. Es relativamente económica y permite un cambio radical con poco esfuerzo. Lo ideal es elegir pintura plástica o acrílica para exteriores, que resista la lluvia y los rayos UV.

Tiene algunas ventajas, como la gran variedad de color que tenemos a disposición, así como su fácil aplicación y lo económica que es. Por otro lado, dura menos, ya que habría que repintar cada 8-10 años.

Revestimientos

como arreglar fachadas de casas

Si buscas un acabado más resistente y con personalidad, los revestimientos son una gran opción. Entre los más usados:

  1. Cerámicos: ofrecen gran resistencia y múltiples diseños, desde rústicos hasta modernos.
  2. Piedra natural. Aporta elegancia, robustez y un carácter único a la fachada.
  3. Madera tratada, que da un toque cálido y natural, aunque requiere mantenimiento periódico.

Para este tipo de acabado ya sería más conveniente contar con profesionales de la reparación de fachadas.

Cerramientos de cristal

Si lo que quieres es ampliar espacios (por ejemplo, una terraza cubierta), el cerramiento de cristal es una solución moderna y funcional. Protege del frío, mejora la eficiencia energética y es bastante luminoso. Eso sí, en edificios requiere autorización de la comunidad y licencia municipal.

Cómo pintar tu fachada

Si optas por la pintura, aquí tienes el paso a paso:

  1. Aplica una capa de imprimación para fijar mejor la pintura y evitar descamaciones.
  2. Usa rodillo de pelo largo para superficies rugosas o pistola de pintura para un acabado más homogéneo.
  3. Pinta de arriba hacia abajo, en franjas verticales, para evitar marcas.
  4. Aplica al menos dos capas para garantizar resistencia.
  5. Un truco: elige colores claros en zonas muy soleadas, ya que absorben menos calor y ayudan a mantener la casa fresca.

Cómo revestir la fachada

El revestimiento requiere un poco más de técnica, pero los resultados son espectaculares. Dependiendo del material:

  1. Cerámicos: se colocan con mortero o adhesivos especiales. Conviene dejar juntas bien selladas para evitar filtraciones.
  2. Piedra natural, que necesita anclajes o sistemas de fachada ventilada. Aporta mayor aislamiento.
  3. Madera. Se instala sobre estructuras metálicas o rastreles de madera tratada. Importante aplicar barnices protectores contra sol y humedad.
  4. Consejo profesional: si el revestimiento cubre gran parte de la superficie, apuesta por una fachada ventilada. Mejora la eficiencia energética y evita problemas de condensación.

¿Qué material es mejor para fachadas exteriores?

No hay una única respuesta, es algo que va a depender bastante de lo que te gusta, de lo que necesitas y de tu presupuesto.

Por ejemplo, las piedras naturales serán lo mejor si quieres que tenga un gran valor estético y que dure el mayor número de años posible. También está el ladrillo o el porcelánico, que también son muy resistentes y fáciles de limpiar, aunque no tan estéticos.

Por supuesto, si quieres un estilo rústico, siempre va a ser mejor de madera, o si buscas modernidad y funcionalidad, de cristal.

Colores para resaltar la fachada de tu casa

Al igual que el material, depende bastante más de tus gustos, pero aquí te dejamos algunas ideas:

  • Blanco: atemporal, elegante y da sensación de amplitud.
  • Tonos tierra y beige: transmiten calidez y combinan bien con piedra y madera.
  • Grises y antracita: modernos, urbanos y fáciles de mantener.
  • Colores vivos (azules, verdes, ocres): aportan originalidad, aunque conviene usarlos en detalles o zonas concretas.

Nuestro consejo es que combines dos tonos para resaltar balcones, marcos de ventanas o zócalos. De esta forma, tu fachada tendrá un aire más dinámico y estilizado.

Renovar la fachada no es solo pintar o revestir, es cuidar la estructura de tu hogar y darle nueva vida. Si quieres saber cómo renovar la fachada de mi casa, recuerda que lo más importante es revisar permisos y normativas, tratar humedades y preparar la superficie, elegir la solución que mejor se adapte a tu presupuesto y estilo, y asegurarte de aplicar materiales de calidad y contar con profesionales si la obra es compleja.

¿Cómo arreglar una puerta mordida por un perro?

como arreglar una puerta mordida por un perro

Quien tiene perro sabe que la etapa de cachorro puede traer más de un disgusto… y es que lo más habitual es encontrarse cosas mordidas, como mandos de televisión o puertas. Los perros, sobre todo cuando son pequeños y están en etapa de crecimiento, o están nerviosos tienden a morder la madera como forma de liberar ansiedad o simplemente por juego. Hoy, os contamos nuestras soluciones para arreglar una puerta mordida por un perro sin necesidad de cambiarla por completo.

Qué necesitas para reparar la puerta mordida por tu cachorro

Antes de comenzar, prepara los siguientes materiales y herramientas. Si la mordida es muy profunda y falta un trozo grande de madera, quizá también necesites un taquito de madera para rellenar la zona antes de aplicar la masilla. La mayoría los encontrarás fácilmente en ferreterías o tiendas de bricolaje:

  • Masilla para madera o pasta reparadora epoxi.
  • Espátula.
  • Lija de grano medio y fino (80-100 y 120-150).
  • Trapo húmedo.
  • Imprimación para madera.
  • Pintura o barniz (según el acabado de la puerta).
  • Brocha o rodillo pequeño.
  • Guantes de protección.

Paso a paso para arreglar la puerta mordida por un perro

Paso 1: Preparación y Limpieza

Ahora vamos al proceso de reparación. Siguiendo estos pasos, podrás devolverle a tu puerta un aspecto impecable:

  1. Retira con una espátula o un cúter las astillas sueltas que hayan quedado en la zona mordida.
  2. Pasa una lija de grano medio para alisar un poco los bordes del mordisco.
  3. Limpia la zona con un trapo húmedo para quitar polvo y restos de madera.
  4. Deja secar bien antes de continuar.
  5. Este paso es clave porque garantiza que la masilla se adhiera correctamente.

Paso 2: Aplicación de la Masilla o Relleno

Aplica la masilla para madera con ayuda de la espátula, rellenando bien el hueco de la mordida. Si el agujero es muy profundo, aplica en capas pero dejando que cada una se seque antes de poner la siguiente. Luego, alisa la superficie lo máximo posible con la espátula, para que después sea más fácil lijar. En caso de que falte un trozo de madera grande, coloca primero un pequeño taquito de madera encolado y luego cubre con masilla.

Paso 3: Lijado y Alisado

Una vez que la masilla esté completamente seca (puede tardar de 1 a 24 horas según el producto), pasa una lija de grano medio para rebajar el exceso. Después, utiliza una lija de grano fino para dejar la superficie lisa y uniforme, y para terminar este paso, limpia bien el polvo resultante con un trapo seco o ligeramente húmedo. El objetivo es que la zona reparada quede al mismo nivel que el resto de la puerta.

Paso 4: Pintura o Barnizado Final

Con este último paso, la mordida quedará completamente disimulada, ya lo verás:

  1. Aplica una capa de imprimación para mejorar la adherencia de la pintura o el barniz.
  2. Cuando se seque, pinta o barniza la puerta en el color original.
  3. Si es necesario, aplica dos capas para lograr un acabado homogéneo.
  4. Deja secar bien antes de volver a usar la puerta.

¿Cómo tapar una mordida de perro?

Si buscas más un arreglo rápido y estético, la mejor opción que te podemos aconsejar es utilizar masilla para madera. Este material es económico, fácil de aplicar y permite lijar y pintar encima, logrando que la zona dañada pase desapercibida. Otra alternativa más resistente es la pasta epoxi, que se endurece mucho más que la masilla tradicional y resulta ideal para daños profundos.

En casos en los que el mordisco se encuentre en el borde de la puerta, también puedes usar un perfil metálico o una moldura para cubrir la zona y, de paso, protegerla de futuros mordiscos.

¿Qué le puedo echar a la madera para que mi perro no la muerda?

¿Ya has arreglado la puerta mordida por tu perro? Tienes la mitad de la solución. Si no quieres que la vuelva a morder, tienes que usar algún producto que sea desagradable para él (en cierta medida) pero que sean seguros. Os recomendamos los sprays repelentes para perros, el vinagre blanco diluido en agua (rocíalo con un pulverizador), zumo de limón que también actúa como repelente natural, o aerosoles anti-mordida con feromonas, que ayudan a corregir la conducta de forma más duradera.

Además de aplicar productos, recuerda que un perro suele morder por aburrimiento o ansiedad. Asegúrate de que tenga juguetes mordedores adecuados, y ejercicio suficiente, verás como no tendrá tantas ganas de destrozar la puerta.

Últimos consejos para que tu cachorro no muerda la puerta

Para que deje de hacerlo en el futuro, te dejamos estos 3 consejos que seguro que te funcionan:

  1. Ofrece juguetes masticables, a los perros les encanta masticar. Proporciona una variedad de juguetes masticables seguros y atractivos para que puedan liberar su energía de forma positiva.
  2. Aumenta la actividad física. Un perro cansado es un perro feliz y menos propenso a la conducta destructiva, así que asegúrate de que tu mascota haga suficiente ejercicio diario.
  3. Adiestramiento, sobre todo si este tipo de comportamiento se repite demasiado, podría ser un signo de ansiedad por separación o aburrimiento. En estos casos, consultar a un adiestrador canino o a un especialista en comportamiento animal puede serte de gran ayuda.

Ya sabes cómo arreglar una puerta mordida por un perro y que la reparación no es complicada. Con masilla, lija y un poco de pintura puedes dejar tu puerta como nueva, sin rastro del mordisco. No obstante, recuerda que es igual de importante prevenir.

Esperamos haberos ayudado con este artículo, ¡Hasta la próxima!

Cómo arreglar una puerta corredera de un armario

como arreglar puerta corredera

Las puertas correderas de armario son prácticas, elegantes y ahorran espacio en habitaciones pequeñas. Con el uso diario pueden presentar algún que otro problema, como atascarse o salirse del riel, pero es bastante fácil de solucionar. Hoy, os contamos cómo arreglar una puerta corredera de un armario, qué hacer si se sale de la guía, cómo solucionar un atasco y qué pasos seguir si la puerta se ha torcido.

¿Se puede reparar una puerta corrediza?

Sí, en la mayoría de los casos se puede reparar una puerta corredera de armario sin necesidad de cambiarla. Los problemas más habituales están relacionados con:

  1. Ruedas desgastadas o rotas.
  2. Guías desajustadas o sucias.
  3. Puertas desniveladas que se salen constantemente del riel.
  4. Tornillos flojos o piezas sueltas.
  5. Desalineación por un mal montaje o por golpes accidentales.

Lo bueno es que todas estas situaciones tienen solución sencilla y, solo en casos extremos habría que sustituirla.

Cómo arreglar la puerta corredera

como arreglar una puerta corredera de un armario

Ahora vamos paso a paso con los problemas más comunes y sus soluciones prácticas.

Si la rueda se ha salido de la guía

Una de las averías más típicas en las puertas correderas de armario es que la rueda se salga de la guía, lo que impide que la puerta se desplace suavemente. Para solucionarlo retira la puerta con cuidado levantándola ligeramente hacia arriba y comprueba si la rueda está dañada o solo se ha salido de su posición. Si la rueda está en buen estado, vuelve a encajarla en la guía, ajusta los tornillos de fijación de la rueda para que quede firme.

Limpia bien el riel con un aspirador o un paño para eliminar polvo y suciedad que puedan volver a provocar el problema. Si la rueda está rota, tendrás que sustituirla por una nueva. Por suerte para todos nosotros, suelen venderse en kits universales en ferreterías.

Si hay un atasco o desajuste de las ruedas

Otro problema frecuente es que la puerta se quede atascada al deslizarla. Esto suele deberse a que las ruedas están desajustadas o a que el riel está sucio. Con estos 5 pasos, tu puerta corredera debería volver a moverse sin esfuerzo:

  1. Examina el riel inferior y superior en busca de suciedad o pequeños objetos (pelusas, piedras, clips, etc.).
  2. Límpialos con un aspirador y un paño húmedo.
  3. Revisa que las ruedas estén alineadas correctamente con la guía.
  4. Ajusta los tornillos de regulación que suelen tener en la parte inferior para equilibrar la altura de la puerta.
  5. Lubrica el riel con un producto específico (como silicona en spray) para mejorar el deslizamiento.

¿Por qué la puerta corrediza de mi armario se sale constantemente del riel?

Si tu puerta corredera se sale del riel de manera repetida, puede haber varias causas distintas:

  1. Ruedas desgastadas o flojas: si no giran correctamente, la puerta se desestabiliza.
  2. Guías sucias. La acumulación de polvo, pelos o suciedad hace que la rueda pierda apoyo.
  3. Desnivel en el suelo o en el montaje: si la estructura del armario no está completamente recta, la puerta tenderá a salirse.
  4. Tornillos flojos tanto en las ruedas como en los anclajes de la puerta.
  5. Peso excesivo en la puerta. Algunas puertas antiguas son muy pesadas y desgastan antes el sistema.

La mejor solución para esto sería que hicieses una puesta a punto completa. Para esto, deberías retirar la puerta y limpiar los rieles a fondo. Luego, habría que revisar y ajustar las ruedas, sustituyendo lasque estén en mal estado. Por último, tendrías que ajustar la altura con los tornillos reguladores para que la puerta esté bien nivelada.

Si después de hacer esto la puerta sigue saliéndose, puede que la guía esté deformada y necesites reemplazarla.

¿Cómo arreglar una puerta corredera que está torcida?

Una puerta torcida no solo se ve mal estéticamente, también suele atascarse y desgastar más rápido el mecanismo. Estaría bien que tuvieses a mano un nivel de burbuja para asegurarte de que las puertas quedan alineadas al terminar el ajuste. Dicho esto, deberías empezar por comprobar el desnivel, cerrando las puertas y observando si una está más baja que la otra.

Ajusta las ruedas, ya que la mayoría de sistemas tienen tornillos de regulación que permiten subir o bajar la puerta hasta nivelarla. Aprieta los tornillos de las bisagras o soportes, porque a veces la puerta se tuerce simplemente porque los anclajes están flojos. Luego, verifica la guía superior, si está torcida o mal colocada, también puede provocar el desajuste.

Para terminar, revisa el peso y estado de la puerta: si la madera se ha combado por humedad, quizá necesite un refuerzo o, en casos extremos, un reemplazo.


Ahora ya sabes cómo arreglar la puerta corredera de un armario, no es complicado una vez hayas identificado el problema. La mayoría de veces basta con limpiar los rieles, ajustar las ruedas o sustituir alguna pieza desgastada. Lo más importante es no dejar que el problema avance, una puerta corredera mal ajustada se desgasta más rápido y puede terminar rompiéndose.

Cómo reparar una puerta de madera

como reparar una puerta de madera

Las puertas de madera son un clásico en cualquier hogar porque aportan muchísima calidez, estilo y resistencia, pero como cualquier puerta, sufre golpes, humedad, arañazos, etc. Con algunos materiales básicos y siguiendo una serie de pasos que os vamos a dejar, sabrás cómo reparar una puerta de madera, tanto si es un arreglo general, como si es un agujero, humedad, o incluso el pomo.

Antes de empezar, si el problema son las bisagras, os recomendamos que entonces leas este otro artículo: cómo ajustar las bisagras de una puerta.

¿Qué materiales necesitas para arreglar una puerta?

La mayoría son materiales fáciles de conseguir en cualquier ferretería o tienda de bricolaje, o por Amazon mismamente, eso lo que tú veas. Deberías tener a mano todo esto:

  • Destornillador para desmontar bisagras y pomos.
  • Lijadora eléctrica o papel de lija de varios granos.
  • Decapante o removedor de pintura (opcional si quieres retirar pintura antigua).
  • Masilla para madera.
  • Espátula.
  • Imprimación para madera.
  • Barniz o pintura en el color que elijas.
  • Brochas o rodillos.
  • Trapos limpios.
  • Guantes de protección y mascarilla.

Pasos para reparar una puerta de madera

El proceso estándar para arreglar una puerta de madera que está desgastada o con mal aspecto lo puedes hacer en 6 pasos y es el siguiente.

1. Desmonta la puerta y retira la pintura vieja

Lo primero es trabajar con comodidad. Retira la puerta de las bisagras con ayuda de un destornillador y colócala sobre dos caballetes o una superficie estable. Si la puerta está pintada y quieres devolverle su aspecto natural o darle un nuevo acabado, tendrás que retirar la pintura antigua. Puedes hacerlo de dos maneras:

  • Con un decapante químico, que reblandece la pintura para retirarla fácilmente con una espátula.
  • Con una lijadora eléctrica, más limpio y rápido, aunque requiere un poco más de paciencia en las molduras.

2. Lija la superficie y corrige imperfecciones con masilla

Una vez retirada la pintura, ya podemos alisar la superficie. Pasa la lijadora con un grano medio (80-100) para quitar restos del barniz, manchas y algún arañazo superficial si lo hay. Si la puerta tiene golpes, hendiduras o pequeñas grietas, aplica masilla para madera con ayuda de una espátula. Rellena bien los huecos y alisa la superficie lo máximo posible.

3. Lija la masilla una vez se haya secado

Deja que la masilla se seque según las indicaciones del fabricante (normalmente unas horas). Después, lija de nuevo la zona con papel de lija de grano fino (120-150) para igualar con el resto de la puerta.

Esto es clave para que, al aplicar la pintura o el barniz, la superficie quede completamente uniforme.

4. Limpia la superficie y aplica la imprimación

Antes de pintar o barnizar, limpia bien toda la puerta con un trapo un poco humedecido para retirar el polvo del lijado y después aplica una imprimación para madera, que ayudará a que la pintura o el barniz se adhieran mejor y duren más tiempo. Muy importante este paso si al final decides pintar la puerta en un color distinto.

5. Pinta y/o barniza

Ahora ya solo tienes que elegir entre barnizar y pintar. El barniz es de lo mejor si quieres conservar el aspecto natural de la madera, realzando la veta y protegiéndola. Si quieres darle un aire nuevo a la puerta con un color diferente, pues escoge pintar.

Aplica al menos dos manos de pintura o barniz, dejando secar bien entre capa y capa. Si quieres un acabado más profesional, lija muy suavemente entre mano y mano con un grano extrafino.

6. Vuelve a montar la puerta

como arreglar una puerta

Cuando ya se ha secado todo bien, solo tienes que volver a montar la puerta en sus bisagras. Os aconsejamos que aprovechéis este momento para revisar también los herrajes, el pomo y la cerradura y, por supuesto, aprieta bien los tornillos si hace falta.

Cómo arreglar un agujero en la puerta de madera

Uno de los problemas más comunes es encontrarse con un agujero en la puerta de madera, ya sea por un golpe fuerte, un tirador que se soltó o un accidente. Para solucionarlo, sigue estos 5 pasos que te dejamos:

  1. Limpia bien el agujero, retirando astillas o restos sueltos.
  2. Rellena el hueco con masilla especial para madera o pasta reparadora epoxi.
  3. Deja secar el tiempo indicado.
  4. Lija la zona para nivelar con el resto de la superficie.
  5. Aplica imprimación y pinta o barniza para igualar el acabado.

Si el agujero es muy grande, puedes reforzarlo colocando un trozo de madera encolado antes de aplicar la masilla, aunque si es demasiado grande, quizá sea hora de contar con un profesional y cambiar la puerta.

Cómo arreglar una puerta hinchada por agua

La humedad es algo que afecta bastante teniendo en cuenta que está hecha de madera y es que, cuando absorben agua, la puerta se hincha y puede rozar con el suelo y atascarse. Ten en cuenta que, aunque te vamos a dejar los pasos para repararla, lo más importante es atacar el origen de la humedad porque si no, volverá a pasar lo mismo. Para arreglar la puerta:

  1. Retira la puerta de las bisagras y colócala en posición horizontal.
  2. Identifica las zonas más hinchadas (normalmente bordes o parte inferior).
  3. Lija con un grano grueso esas zonas hasta rebajar el grosor.
  4. Si el hinchazón es muy severo, puedes cortar unos milímetros con una cepilladora manual.
  5. Aplica barniz o sellador en los bordes para evitar que la humedad vuelva a penetrar.

Cómo arreglar el pomo de la puerta

Además de reparar la puerta de madera, algo muy frecuente que también pasa es que el pomo de la puerta se afloje o se rompa. Si te ha pasado algo de esto, basta con que aflojes sus tornillos, retires el pomo y revises si las piezas interiores están dañadas o simplemente flojas.

Si solo está suelto, vuelve a encajarlas y aprieta los tornillos. Si la pieza interna está dañada, sustituye el mecanismo completo por uno nuevo (se venden kits de pomo y cerradura universales muy económicos). Así de fácil ya lo tendrías arreglado.

Como hemos visto, reparar una puerta de madera es un trabajo bastante asequible para cualquiera. Desde lijar y pintar hasta arreglar un agujero, solucionar el hinchamiento por agua o reparar el pomo, todo puede hacerse con materiales básicos y un poco de tiempo. Lo mejor de todo es que, además de ahorrar dinero, prolongas la vida útil de tus puertas y mantienes la estética de tu hogar en buen estado. ¡Hasta la próxima!

Cómo arreglar la cisterna del baño que pierde agua

como sellar filtraciones de agua en cisternas

¿Sabías que una cisterna que pierde agua puede llegar a desperdiciar entre 8 y 25 litros cada hora? Si haces el cálculo, eso significa que al día se pueden perder fácilmente más de 200 litros de agua, y al mes, miles. Además del impacto medioambiental, este problema también es un aumento considerable y directo en tu factura. La mayoría de fugas en las cisternas se pueden solucionar con herramientas básicas y un poco de paciencia, por lo que os vamos a explicar arreglar la cisterna del baño que pierde agua, cuáles son las causas más comunes y qué hacer para evitar que vuelva a suceder.

¿Cuáles son las causas de que una cisterna pierda agua?

Las cisternas pueden perder agua por diferentes motivos:

  1. Junta deteriorada: con el tiempo, las gomas que sellan los mecanismos se resecan y dejan escapar agua.
  2. Flotador dañado. Si no cierra bien el paso del agua, la cisterna se llena en exceso y se desborda.
  3. Mecanismo de carga desajustado. A veces el problema no es una rotura, sino un simple desajuste.
  4. Desgaste por ser un modelo antiguo, ten en cuenta que las cisternas viejas suelen tener piezas desgastadas difíciles de ajustar.
  5. Válvula de llenado defectuosa: si no corta el agua a tiempo, se produce un goteo constante.
  6. Válvula de descarga con fugas, verás que ocurre cuando el agua pasa al inodoro aunque no hayas pulsado el botón.
  7. Cal y suciedad acumulada. Los restos de cal impiden que las piezas cierren correctamente.

Cómo arreglar una cisterna que tiene fuga de agua

Ahora sí, vamos a lo práctico. Dependiendo del origen de la fuga, el proceso de reparación será distinto. A continuación os detallamos los casos más habituales y sus soluciones.

Junta deteriorada

Las juntas de goma son las que tienen que sellar los mecanismos, por lo que si están viejas o cuarteadas, el agua se va a colar. La solución es sencilla y económica porque apenas cuestan unos céntimos las juntas:

  1. Cierra la llave de paso del agua.
  2. Vacía la cisterna tirando de la cadena.
  3. Retira la pieza donde esté alojada la junta (suele estar en la válvula de descarga).
  4. Sustituye la goma por una nueva del mismo tamaño.
  5. Monta de nuevo y abre el agua para comprobar que la fuga ha desaparecido.

Flotador dañado

El flotador controla la entrada de agua en la cisterna. Si se agujerea o no sube correctamente, la cisterna no se detiene al llenar, por lo que verás como acaba desbordándose. La solución:

  1. Revisa el estado del flotador. Si está perforado, tendrás que reemplazarlo.
  2. Si solo está desajustado, regula su altura para que corte antes la entrada de agua.
  3. Ajusta el tornillo o la varilla que lo sujeta, según el modelo.

Mecanismo de carga desajustado

como arreglar la cisterna del baño que pierde agua

A veces el problema no está en la pieza en sí, sino en un mal ajuste del mecanismo, por lo que aquí te no haría falta una pieza nueva, solo una regulación adecuada. La solución:

  1. Localiza el mecanismo de llenado. Suele estar en el lado o interior de la cisterna del inodoro.
  2. Ajusta el tornillo que regula el nivel máximo de agua.
  3. Haz pruebas tirando de la cadena y observando si el agua corta en el nivel correcto.

Válvula de llenado defectuosa

También puede pasar que este mecanismo, en vez de simplemente estar desajustado, sea defectuoso. Por lo tanto, la solución sería:

  1. Cierra la llave de paso.
  2. Retira la válvula defectuosa.
  3. Sustitúyela por una nueva, asegurándote de que es compatible con tu cisterna.
  4. Vuelve a conectar y abre el agua para comprobar que cierra correctamente.

Desgaste por ser un modelo antiguo

En cisternas muy viejas, el desgaste generalizado de las piezas provoca fugas difíciles de resolver con reparaciones puntuales. En estos casos, lo más recomendable es sustituir el mecanismo completo de la cisterna. Puedes encontrar kits universales en ferreterías por un precio entre 15 y 40 €.

Válvula de descarga con fugas

La válvula de descarga es la que libera el agua al pulsar el botón. Si no ajusta bien, puede dejar escapar agua constantemente al inodoro. Te recomendamos que lo soluciones así:

  1. Retira el mecanismo de descarga.
  2. Limpia bien la goma y la zona de contacto.
  3. Si la goma está deteriorada, sustitúyela.
  4. Monta de nuevo y haz pruebas.

Cal y suciedad acumulada

En zonas con agua dura, la cal puede acumularse en las piezas y evitar que cierren bien. Para eliminar la cal y la suciedad:

  1. Desmonta los mecanismos de llenado y descarga.
  2. Límpialos con vinagre o un desincrustante específico para cal.
  3. Asegúrate de enjuagar bien antes de volver a montar.

De hecho, os recomendaríamos que hagáis esto de forma periódica, incluso si la cisterna está perfectamente.

¿Cómo sellar filtraciones de agua en cisternas?

En ocasiones, la fuga no viene de los mecanismos, sino de pequeñas filtraciones en el depósito de la cisterna. Esto puede suceder en modelos de porcelana con microfisuras o en cisternas de plástico deterioradas. Si la fisura es muy grande, lo más recomendable es cambiar la cisterna por completo, ya que el sellado será solo una solución temporal. Por otro lado, si la fisura es algo más pequeña:

  1. Localiza la grieta o la zona de fuga.
  2. Lija suavemente el área para mejorar la adherencia.
  3. Aplica un sellador específico para sanitarios (silicona neutra o masilla epoxi).
  4. Deja secar el tiempo recomendado por el fabricante.
  5. Rellena la cisterna y comprueba que el sellado funciona.

Consejos para que la cisterna no vuelva a perder agua

Aunque ya lo hayas solucionado, ambos sabemos que es mejor prevenir que curar. Por lo tanto, para prevenir futuras fugas, te dejamos nuestros consejos prácticos:

  • Revisa periódicamente los mecanismos, ya que haciendo una inspección cada seis meses puedes evitarte problemas mayores.
  • Limpia la cal de forma regular. Coloca filtros en la entrada de agua si vives en una zona con mucha dureza.
  • No uses productos agresivos dentro de la cisterna: las pastillas de limpieza pueden deteriorar las gomas.
  • Sustituye las piezas cuando veas desgaste: no esperes a que la fuga sea evidente.
  • Controla el nivel de agua y regula el flotador para que no sobrepase el límite.

Ahora ya sabes cómo arreglar la cisterna del baño que pierde agua y que este problema, aunque molesto, tiene soluciones muy sencillas y económicas. Lo más importante es actuar cuanto antes, ya que una cisterna en mal estado no solo desperdicia agua y dinero, sino que también puede dañar otras partes del inodoro.

Cómo renovar un baño viejo

como renovar un baño viejo

Un baño puede ser funcional, práctico y al mismo tiempo estético. Sin embargo, cuando los años pasan, es normal que los azulejos se vean anticuados, el suelo presente manchas imposibles de quitar o la grifería ya no funcione como antes. Si no sabes cómo renovar un baño viejo, existen muchas formas de hacerlo sin necesidad de una gran obra, aunque también hay opciones más completas.

Antes de seguir, quizá te interese este artículo: cómo reformar un baño pequeño. Empecemos.

Cómo renovar tu baño viejo sin obra

Paredes y azulejos

Uno de los elementos que más delatan el paso del tiempo en un baño son los azulejos anticuados. Si no quieres meterte en obra, existen varias alternativas:

  • Pintura especial para azulejos: una opción económica y efectiva. Con ella puedes cambiar el color de las paredes en un par de días y transformar por completo el aspecto del baño.
  • Vinilos adhesivos. Se colocan directamente sobre los azulejos y permiten jugar con diseños modernos como imitación mármol, hidráulico o geométrico.
  • Paneles de PVC, que se instalan fácilmente sobre la pared existente, son resistentes a la humedad y están disponibles en infinidad de acabados.

Suelo

El suelo también puede renovarse sin levantar el antiguo. Hoy en día hay soluciones rápidas, limpias y económicas, por ejemplo, tienes los suelos vinílicos adhesivos, que son resistentes al agua, antideslizantes y fáciles de colocar encima del pavimento viejo. También tienes el microcemento: crea una superficie continua, sin juntas, y aporta un toque moderno y elegante.

Si solo tienes que cubrir una zona concreta, como solución temporal, puede que una alfombra vinílica sea suficiente.

Accesorios

Muchas veces, los pequeños detalles marcan la diferencia. Cambiar algunos accesorios de baño puede rejuvenecer el espacio en cuestión de horas:

  • Porta-toallas modernos.
  • Espejos con luz LED integrada.
  • Un mueble auxiliar estrecho para ganar orden.
  • Cortinas o mamparas más actuales.
  • Nuevos apliques de iluminación para crear un ambiente más acogedor.

Con estos cambios sencillos ya tendrás un baño mucho más atractivo sin necesidad de grandes obras. Si necesitas más ideas, te dejamos por aquí este artículo: cómo reformar un baño sin obras.

Cómo arreglar baños viejos con obra

como arreglar baños viejos

Si tu baño necesita algo más que un lavado de cara, quizá sea el momento de una reforma parcial. No hablamos de tirar paredes o hacer un proyecto enorme, sino de algo más puntual, como los grifos de tu baño.

Grifería

Los grifos son un punto focal en cualquier baño. Cambiarlos por modelos modernos no solo mejora la estética, también la funcionalidad. Lo que nosotros te recomendamos:

  • Grifos termostáticos para la ducha, que mantienen la temperatura estable.
  • Grifos de bajo consumo, ideales para ahorrar agua.
  • Acabados en negro mate, dorado o acero cepillado, que aportan un toque contemporáneo.

Cambiar bañera por ducha

Una de las reformas más habituales al arreglar baños viejos es sustituir la bañera por un plato de ducha. Tiene muchas ventajas, como la amplitud y comodidad y, además, es más accesible para personas mayores o con movilidad reducida. También permite un diseño más moderno con mampara de cristal. Si te preguntas cuanto te llevaría, el cambio suele tardar entre 1 y 3 días, dependiendo del estado del baño y de las instalaciones.

Lavabo flotante para más espacio

Si tienes un baño pequeño, instalar un lavabo flotante es una gran idea. Este tipo de lavabos van anclados a la pared, dejando libre el espacio inferior. Eso no solo da sensación de amplitud, también facilita la limpieza. Puedes acompañarlo con un mueble suspendido para guardar productos de higiene y mantener todo en orden.

Espejos

Recuerda que no es solo un accesorio práctico, es otro punto focal del baño que ocupa gran parte de su decoración, así que es muy importante elegir el adecuado:

  • Espejos grandes para multiplicar la sensación de amplitud.
  • Espejos con luz LED para mejorar la iluminación.
  • Modelos redondos para un estilo más actual y minimalista.

Cristal templado para mayor durabilidad

Si instalas una mampara o una separación para la ducha, opta por cristal templado. Es mucho más seguro, resistente y duradero que otros materiales. Además, estéticamente aporta ligereza y un aspecto mucho más moderno que las clásicas cortinas de plástico.

Nuestros consejos de profesionales para renovar un baño viejo

A lo largo de los años, quienes nos dedicamos a reformas coincidimos en una serie de consejos que marcan la diferencia al renovar un baño viejo, y nosotros te queremos dejar los 7 más importantes:

  1. Define un presupuesto claro: antes de empezar, decide cuánto estás dispuesto a invertir. Esto evitará gastos innecesarios.
  2. Piensa en la funcionalidad, porque un baño debe ser práctico antes que nada. Planifica dónde irán los enchufes, las toallas o el espacio de almacenaje.
  3. La iluminación es clave, evita luces frías y directas; apuesta por iluminación cálida y distribuida.
  4. Colores claros para espacios pequeños. Si tu baño es pequeño, los tonos claros en paredes y suelos multiplicarán la luz y la sensación de amplitud.
  5. Apuesta por materiales fáciles de mantener: suelos vinílicos, microcemento o azulejos rectificados son opciones duraderas y de bajo mantenimiento.
  6. Muy importante la ventilación, ya que un baño sin buena ventilación acumula humedad y malos olores. Instalar un extractor puede ser la mejor inversión.
  7. Busca equilibrio entre estética y durabilidad. Está bien dejarse llevar por las tendencias, pero elige materiales y acabados que resistan bien el paso del tiempo.

Renovar un baño viejo no tiene que ser ni caro ni complicado. Puedes empezar por cambios pequeños como pintar azulejos, colocar suelo vinílico o actualizar los accesorios, y si buscas un cambio mayor, apostar por griferías modernas, duchas más prácticas o lavabos flotantes. Simplemente evalúa el estado de tu baño, tus necesidades y presupuesto. Con estas ideas podrás decidir si lo mejor es una renovación sin obra, una reforma parcial o una transformación completa. ¡Hasta la próxima!

Cómo cambiar el color del parquet tú mismo

se puede pintar el parquet

El parquet es uno de los suelos más valorados, sobre todo en viviendas, debido al aspecto cálido que tiene. No obstante, como cualquier suelo, se puede desgastar, rayas, o simplemente no encaja con tu decoración actual. Si te preguntas si se puede cambiar su color sin sustituirlo por completo, la respuesta es sí. Puedes hacerlo tú mismo si sigues nuestros pasos, por que hoy, os explicamos cómo cambiar el color del parquet de forma sencilla, los materiales qué necesitas, cuanto puede costarte y qué hacer si el suelo está muy dañado.

Qué necesitas para cambiar el color del parquet

Lo primero es prepararnos una lista de materiales y herramientas porque, aunque no sea algo complicado, si requiere que tengas un mínimo de tiempo, dedicación, y las herramientas correctas. Esto es lo básico que vas a necesitas:

  • Lijadora de parquet, que se puede comprar o alquilar en ferreterías o centros de bricolaje.
  • Lijas de diferentes grosores (gruesa, media y fina).
  • Tinte para madera en el color deseado: hay tonos roble, nogal, wengué, gris, blanco envejecido, etc.
  • Brochas o rodillos para aplicar el tinte.
  • Barniz para parquet o aceite protector (mate, satinado o brillante).
  • Masilla para madera en caso de que existan pequeñas grietas o juntas abiertas.
  • Plásticos protectores y cinta de carrocero para cubrir rodapiés, puertas y muebles.
  • Guantes, gafas protectoras y mascarilla para trabajar con seguridad.

Cómo cambiar el color del parquet paso a paso

Ya podemos pasar a cómo cambiar el color del parquet, y lo primero es que debes saber que el procedimiento sigue siempre la misma lógica: primero se retira la capa superficial, después se aplica el nuevo color y finalmente se protege con barniz o aceite.

como cambiar el color del parquet

1. Prepara el suelo (lijado/acuchillado)

Lo primero es lijar o acuchillar el parquet, porque con esto es con lo que vamos a eliminar el barniz antiguo, arañazos y las manchas, dejando nuestra madera lista para absorber el nuevo tinte.

Te recomendamos que vacíes la habitación por completo y protejas las paredes y puertas con cinta y plástico. Luego, utiliza la lijadora comenzando con un grano grueso (40-60) para retirar la capa superior. Para terminar, repite con una lija de grano medio (80-100) y termina con una fina (120-150) para suavizar la superficie. Aspira muy bien el polvo que hayas dejado, porque cualquier resto puede arruinar el acabado que le demos al final.

2. Aplica el tinte

Ahora ya puedes pasar a la parte más creativa, dar color al parquet. Ten cuidado con el color, porque si es una madera oscura, puede no absorber bien un tinte claro. Dicho esto:

  • Elige el tinte en el tono deseado (desde colores claros como el blanco o el roble hasta tonos oscuros como el nogal o el wengué).
  • Mezcla bien el producto antes de aplicarlo.
  • Usa una brocha ancha o rodillo, trabajando siempre en el sentido de la veta de la madera.
  • Aplica una capa fina y uniforme. Si quieres un tono más intenso, puedes dar una segunda pasada tras el secado de la primera.

3. Secado

El tiempo que le cueste secarse a tu tinte depende del fabricante, pero suele estar entre 6 y 12 horas. Es muy importarte respetar estos tiempos, así que deja que el parquet se seque en una habitación bien ventilada. Si has aplicado demasiada cantidad, retira el exceso con un paño limpio antes de que endurezca. También deberías evitar el caminar sobre la superficie durante el secado para no dejar marcas.

4. Acabado de barniz o aceite

Lo último que nos falta por hacer es proteger el parquet para que el nuevo color que hayas elegido dure muchos años. Si eliges barniz, tendrás un acabado más resistente a golpes y arañazos. Puedes optar por mate, satinado o brillante según tu preferencia. Si prefieres un aceite para parquet, conseguirás un acabado más natural, aunque requiere un mantenimiento más frecuente.

Aplica dos o tres capas de barniz, dejando secar bien entre cada una (entre 12 y 24 horas según el producto). Con esto último, ya habrás conseguido cambiar el color de tu parquet.

¿Cuánto cuesta cambiar el color del parquet?

Si lo haces tú mismo, el precio es bastante asequible, ya que la mayor inversión será tu tiempo y esfuerzo. Varía bastante en función de los metros cuadrados, pero el precio suele estar entre 30 y 40€ por metro cuadrado. Por dar un coste aproximado, en total, podrías cambiar el color de tu parquet por unos 100-150 € en materiales si lo haces tú mismo. En cambio, si contratas a un profesional, el precio puede rondar entre 30 y 40€ por metro cuadrado, dependiendo del estado del suelo y el acabado elegido.

¿Cómo cambiar un parquet estropeado?

En algunos casos, el parquet no solo necesita un cambio de color, sino también una reparación. Quizás se ha hinchado por la humedad, tiene tablillas sueltas o está muy desgastado. En estos casos, el proceso es un poco diferente.

Pasos a seguir

  1. Identificar el problema.
    1. Si el parquet está hinchado por agua, habrá que secar la zona y sustituir las tablillas dañadas.
    2. Si hay piezas sueltas, se pueden volver a encolar.
    3. Si tiene muchas rayas profundas, será necesario un acuchillado más intenso.
  2. Sustituir lo que está dañado.
    1. Retira con cuidado las lamas afectadas.
    2. Coloca piezas nuevas de la misma madera y tonalidad.
    3. Si no encuentras exactamente el mismo tono, puedes teñirlas para que encajen.
  3. Nivelar la superficie. Una vez reparado, lija toda la zona para que no se noten diferencias entre lo viejo y lo nuevo.
  4. Aplicar el mismo proceso de cambio de color. Tras reparar, sigue los pasos de lijado, aplicación de tinte y barnizado.

Como ves, puedes cambiar el color del parquet tú mismo si tienes todas las herramientas, un poco de paciencia y siguiendo estos pasos. No importa si es para renovar un salón, dormitorio o dar un aire moderno a tu oficina, cambiar el color del parquet es muy práctico y económico. Además, si tu suelo está dañado, siempre tienes la opción de reparar las zonas afectadas antes de aplicar el nuevo acabado.

Si te animas a hacerlo tú mismo, ahorras dinero y disfrutas de la satisfacción de ver el resultado final con tus propias manos. Y si prefieres contactar con un profesional, sabrás exactamente qué proceso van a seguir y cuánto te costará.

Cómo pintar un baño al completo

como pintar baldosas de baño

Pintar un baño no siempre está en nuestros planes cuando pensamos en reformas, pero es una de las soluciones más efectivas y económicas para renovarlo por completo. La humedad, los años y el uso diario hacen que las paredes pierdan brillo y frescura. Por lo tanto en esta guía vamos a ver cómo pintar un baño por completo, desde las baldosas hasta el techo, tanto si tienes azulejos como si no. Antes de seguir, quizá te interese: Cómo reformar un baño sin obras. ¡Empecemos!

Cómo pintar las baldosas del baño

1. Preparación

Tendremos que empezar por una limpieza a fondo, así que mejor si usas un desengrasante para eliminar restos de jabón, grasa y moho, con lo que tendrás que prestar atención a las juntas. Luego ya podremos reparar si hay algo que esté mal, por ejemplo, si hay baldosas sueltas o grietas. Las juntas muy dañadas se pueden rellenar con masilla.

Igual de importante será la protección del baño, así que cubre con cinta de carrocero los marcos, griferías y cualquier superficie que no quieras pintar. Protege también el suelo con plásticos o papel.

2. Imprimación

La imprimación es imprescindible para que la pintura se adhiera a una superficie tan lisa como la cerámica. Aplica una imprimación especial para azulejos con rodillo de espuma (para grandes superficies) y una brocha para los bordes y esquinas. Deja secar el tiempo que indique el fabricante, normalmente entre 4 y 6 horas.

3. Pintura antihumedad

como pintar un baño sin azulejos

Cuando la imprimación esté lista, ya podemos pintar (al igual que con la imprimación, rodillo y brocha). Te aconsejamos que uses pintura epoxi bicomponente o esmalte especial para azulejos, resistente a la humedad y fácil de limpiar. Aplica la pintura en capas finas, mejor dos o tres capas que una muy gruesa.7

4. Acabado

Si quieres un acabado profesional lija muy suave entre capa y capa para quitar cualquier motita de polvo y, cuando la última capa esté seca, dale un barniz transparente para azulejos que les dará brillo, y los protegerá mucho mejor.

5. Tiempos de secado

El baño es una zona con mucha humedad, así que aquí no debemos ir con prisas:

  1. Entre capas de pintura, mínimo de 12 horas por si acaso.
  2. Después del acabado, espera 1 semana entera antes de usar la ducha para que la pintura se haya secado del todo.

Cómo pintar un baño sin azulejos

En algunos baños las paredes son lisas, de yeso o pladur. En este caso, el proceso es más sencillo, pero igualmente importante para evitar problemas de humedad. Aquí tienes un paso a paso muy detallado:

  1. Limpia bien las paredes. Retira polvo, grasa y cualquier resto de productos. Si hay manchas de moho, elimínalas con agua y lejía.
  2. Repara las imperfecciones. Usa masilla para tapar agujeros, rayones o pequeñas grietas. Deja secar y lija suavemente para que la superficie quede lisa.
  3. Protege la estancia. Pon cinta de carrocero en los marcos, espejos, enchufes y muebles, y cubre el suelo.
  4. Aplica una pintura selladora o imprimación. Esto ayudará a que la pintura se adhiera mejor y evitará que aparezcan manchas por la humedad.
  5. Usa pintura antihumedad o pintura plástica lavable.
  6. Con rodillo para grandes zonas y brocha para los bordes, aplica la primera capa.
  7. Deja secar bien (unas 6 horas) y aplica una segunda capa para conseguir un color uniforme y duradero.
  8. Ventilación. Abre ventanas o usa un ventilador para que la pintura se seque más rápido y se eviten olores.

Si ya tienes azulejos pero no sabes cambiarlos de forma sencilla sin obras, aquí te dejamos este artículo sobre cómo cambiar los azulejos del baño sin obras.

Cómo pintar el techo de un baño

como pintar el techo de un baño

El techo es otra parte importante. Con el tiempo suele acumular humedad y manchas, por lo que te conviene incluirlo en tu reforma. Te recomendamos que desde un principio también te protejas tú mismo porque vas a tener que estar mirando hacia arriba bastante tiempo, así que, además de unos guantes para pintar, cógete también unas gafas protectoras. Vamos a verlo paso a paso:

  1. Limpieza previa. Elimina el polvo con una escoba o aspirador. Si hay moho o manchas de humedad, límpialas con agua y lejía y deja secar bien.
  2. Protege todo lo que hay debajo. Usa plásticos para evitar que caigan gotas de pintura sobre los muebles y el suelo.
  3. Si hay pequeñas grietas o desconchones, rellénalos con masilla, deja secar y lija.
  4. Usa pintura plástica antihumedad o pintura específica para techos de baño. Son transpirables y harán que no te aparezcan hongos.
  5. Para aplicarla, comienza pintando los bordes con una brocha y, luego, pinta el resto con un rodillo de pelo medio, siempre en pasadas largas y cruzadas para cubrir bien todo.
  6. Cuando hayan pasado unas 6 horas, puedes pasar a aplicar una segunda capa.

¿Qué pintura se usa para pintar el techo del baño?

Teniendo en cuenta que es la parte alta de este espacio, el techo de un baño necesita una pintura antihumedad que resista el vapor y evite la aparición de moho. Las más recomendadas son:

  • Pintura plástica especial para baños y cocinas. Transpirable y fácil de limpiar.
  • Pintura acrílica mate, ideal para techos, no refleja demasiado y cubre bien las imperfecciones.
  • Pintura antimoho. Si tu baño tiene poca ventilación, este tipo de pintura contiene aditivos que previenen hongos y moho. Es la que te recomendamos.

¿Qué tipo de pintura se adhiere a las baldosas del baño?

Las baldosas del baño requieren una pintura con mucha adherencia. Las mejores opciones siempre van a ser los esmaltes sintéticos que están fabricados para los azulejos y la pintura epoxi bicomponente, que es muy resistente a la humedad y a los golpes. También es muy recomendable que uses un barniz sellador transparente porque lo protegerás mucho mejor y darás un brillo al acabado final. Es importante no saltarse la imprimación, porque es lo que hace que estas pinturas se agarren correctamente.

Ahora que has visto cómo pintar un baño de arriba a bajo, es una tarea que puedes hacer tú mismo si te organizas bien y eliges los tipos de productos que te hemos marcado. Tanto si tienes azulejos como si no, o si solo quieres renovar el techo, con estas técnicas conseguirás renovar tu baño y con un aspecto mucho más moderno sin obras.

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